Hace algunos días Liam cumplió 2 y medio.
Este es un periodo de muchos cambios: está dejando los pañales, lleva días durmiendo en su nueva cama, inventa historias con sus juguetes, y su vocabulario se disparó, haciéndolo capaz de contar historias con muchos detalles.
Pero aún es el chiquitito de la casa y aunque parte su noche en su cama, en medio de la noche viene a la nuestra o me llama para que lo vaya a buscar. Cuando lo tomo sonríe y cuando lo pongo en la cama me abraza… es un buen balance para nosotros y acurrucarlo en medio de la noche es uno de mis momentos favoritos del día.
Liam llegó a nuestra familia y trajo muchas risas porque el gordito es un payaso! le gusta causar reacciones y aunque cuando era más chiquitito era difícil porque aveces le pegaba o mordía a otros niños, esa etapa quedó atrás y ahora busca reacciones diciendo o haciendo cosas que nos hacen reír.
Cuando estábamos en el crucero hace algunos meses, un hombre le dijo a Will que teníamos que cuidar a Liam porque él iba a causar un impacto importante en el mundo. No sé si este hombre podía ver el futuro, o se dio cuenta del impacto que este chiquitín ha tenido en nuestras vidas, haciéndolas más completas y felices.
We love you little one. Always and forever.
