He estado esperando este fin de semana hace tiempo. La llegada de la primavera es un día súper especial para mi porque termina oficialmente el invierno, una estación que aquí en vez de 3 meses dura 5 (frío de noviembre a marzo). En la primavera vamos un montón al zoológico, la granja, parques nacionales, caminatas en la naturaleza y pasamos mucho tiempo fuera de casa. Las flores son preciosas y el clima demasiado rico para explorar.
Mi plan era partir el sábado aprovechando el “Westchester Restaurant Week” en un restaurante a la orilla de río Hudson con mi amiga Mabel (que está trabajando por un semestre en NYC) y su familia. Busqué un montón un lugar lindo, cerca de un parque para que los niños jueguen, y para mi sorpresa encontré un lugar y puede hacer reservas a tiempo.
Viernes por la Noche.
En medio de la noche Liam se despertó tosiendo y vomitó 2 veces. En la mañana el gordo tenía fiebre así que llamé a mi amiga y al restaurant para cancelar los planes.
Ayer estuve todo el día con un gordo mañoso y aunque salimos a comer en la noche (gracia ibuprofeno!) el día fue lejos de lo que había planeado.
Domingo.
Son las 4:38pm, el finde está por terminar y hoy pasamos todo el día en la casa. Will y Elisa fueron a un cumpleaños y al supermercado, y Liam ha visto más TV de lo que Elisa vió en un año de su vida.
Pero aunque nuestra primavera no partió como lo esperaba, me estoy consolando con una lista de cosas que si vamos a hacer cuando el clima esté mejor… y Liam no esté enfermo.
Días como estos me ayudan a apreciar aún más los días de sol con gordos sanos y en un país tan lindo como este.